Se registran los primeros avistamientos de ballenas jorobadas en costas de Colima

Hace un par de días, en las costas de Manzanillo, Colima, se registraron los primeros avistamientos de ballenas jorobadas. Durante esta temporada, se estima que cerca de 2 mil ballenas arriben al Pácifico Central mexicano con fines de reproducción y cría de ballenatos.

“En invierno la mayoría de las especies de ballena se trasladan a aguas más cálidas porque existen las condiciones óptimas para sus ballenatos, si una ballena nace en el norte en una zona con aguas muy frías es muy probable que no sobreviva porque perdería mucha energía, por eso migran a temperaturas cálidas, para sobrevivir”, informó mediante entrevista con Estación Pacífico, Christian Daniel Ortega Ortiz, profesor en la Facultad de Ciencias Marinas de la Universidad de Colima.

Estas especies, detalló, se localizarán en en el Pacífico mexicano hasta principios de abril del siguiente año, luego de que los ballenatos estén listos para migrar hacia la zona norte del país.

“Nos ha tocado ver que una ballena con cría puede permanecer dentro de una bahía por días, casi un mes, cuidándola, enseñándole a mejorar su respiración, su buceo, alimentándola y entrenándola para migrar entre 6 mil y 8 mil kilómetros, la cría tiene que estar fuerte, tiene que ser veloz porque los depredadores, como las orcas, las van a acechar, esta crianza es muy importante, como un entrenamiento”.

¿Cuáles son los riesgos a los que se enfrentan?

De acuerdo con el investigador de la Facultad de Ciencias Marinas, se estima que en las costas mexicanas existen cerca de 9 mil ballenas jorobadas, tan sólo el 11.25 por ciento de su población inicial histórica. Una de las principales causas de esta drástica pérdida, asegura, ha sido la industria pesquera y marítima.

“No hay en todo México medidas de mitigación, las embarcaciones de pesca ribereña, de pesca deportiva, grandes buques comerciales, grandes buques turísticos, es un flujo de tránsito marítimo enorme que cada vez crece más, por lo tanto se deben hacer estrategias para que ambas actividades, la vida de las ballenas y la actividad del tránsito marítimo coexistan”.

Países como Estados Unidos, explicó, combate esta amenaza a las especies marinas nombrando zonas de navegación seguras, y restringiendo embarcaciones en núcleos donde se sabe que hay madres con crías.

¿Las crías de ballena corren algún riesgo mientras se encuentran en la zona litoral cercano a Colima? -Se le cuestionó.

“Sí, sobre todo cuando inician a verlas desde la playa, muchas personas rentan embarcaciones para ir a verlas y no es algo que deban hacer, están en un entrenamiento importante y no debemos de perturbarles porque puede tener consecuencias serias, incluso pueden resultar heridas por las mismas hélices de los motores, ya se ha registrado en Puerto Vallarta en Bahía de Banderas, las crías son un poco torpes porque apenas están aprendiendo a nadar, por eso pueden llegar a pegar con alguna embarcación, son bebés”.

¿Turismo responsable?

Jesús García, integrante de Vigilemos Manzanillo A.C., compartió una serie de recomendaciones para llevar a cabo un turismo que busque ser responsable durante la temporada vacacional:

-Durante paseos marítimos en aguas locales, debe mantenerse una distancia mínima de 240 metros hacia las ballenas y sus crías.

-No intentar acercarse a ellas, la presencia de personas puede alterar el comportamiento de las ballenas adultas.

-En caso de observar a estas especies con cuerdas o atrapadas en redes fantasma, reportar ante las autoridades locales, o al grupo universitario de investigación de mamíferos marinos.

-No arrojar o verter cualquier tipo de desechos, especialmente los plásticos y las colillas de cigarros.

“Estas fechas coinciden con el incremento de avistamiento de ballenas en las costas de Colima, es probable que durante su visita o paseo en aguas locales se encuentren con una de ellas, les invitamos a hacer un turismo responsable y a respetar y cuidar de nuestras especies marinas”.