#ElFaro: Sexualidad y bajas pasiones / Que expliquen ausencias y presencias
En el delirio de la cerrazón, al ombudsperson local no se le ocurrió mejor manera de defender los derechos de todas y todos que rodearse de una cohorte integrada por una de las partes y pedir a los tres órdenes de gobierno ejercer para la contraparte ¡censura previa! La cual, dicho sea de paso, está prohibida por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Del otro lado tampoco se venden piñas: se oferta mucha retórica, manoseo estadístico y algunos sofismas para defender posturas que aunque sea indirectamente terminan intentando limitar libertades a un sector de la población, lo cual atenta contra la progresividad de los derechos, otro principio —¡adivinaron!— garantizado por la Carta Magna del país.
La pregunta para tirios y troyanos y —por qué no decirlo— medios es, ¿eso deseamos? ¿No hay manera de escucharnos los que pensamos distinto y encontrar el terreno en común? Valdría la pena no censurar debates, sino fomentarlos bajo marcos de respeto y tolerancia.

De acuerdo con el boletín, los participantes hablaron de muchos temas pero no tanto de pesos y centavos, pues de los recursos que los comisionados anticorrupción requieren, sólo la diputada Araceli García atinó a sugerirles enviar el presupuesto a las altas instancias del Legislativo, «para ver de qué forma se puede apoyar».
No hay que olvidar que el SAE, mucho o poco, ya tiene un presupuesto asignado —en su momento aprobado por el Congreso—, y que lo que sus integrantes están pidiendo se llama ampliación presupuestal, y eso se solicita en las oficinas del Complejo Administrativo o en las de Casa de Gobierno, donde ya se les manifestó «buena voluntad», pero hasta ahí.
El viernes se cumple el plazo para su amago de paro de labores (algunos preguntan “cuáles”). Cuenta regresiva.

Los diputados Remedios Olivera (MC) y Rogelio Rueda (PRI) no asistieron, y más allá de justificantes quedan ganas de escuchar sus explicaciones sobre su postura en torno al impase en el que está dicha enmienda. Esto, sobre todo de parte del coordinador tricolor, quien no sólo votó a favor de la modificación —que algunos malpensados atribuyeron a una intentona de restar influencia a la FEC y a políticos cercanos a ella— sino que la respaldó en una conferencia de prensa donde junto a los líderes parlamentarios de Morena y del PAN dijo que no era ‘vetable’ por el Ejecutivo, puesto que era mayoritariamente un mandato de la Suprema Corte. Pero luego de que el mandatario anunció que efectivamente ejercería su derecho a vetarla y que incluso emprendería el camino de la controversia constitucional, ya no se le volvió a ver.

¿Y la equidad y la imparcialidad? Porque ni modo que luego también vaya a actos partidistas de otras fuerzas políticas en días hábiles (que el Ejecutivo ya dejó claro que para él son de lunes a viernes). ¿O a caso querrá argumentar que la CNOP es una organización que existe más allá del PRI?

¡Oh, y ahora… ¿quién podrá defenderlos?!
